El secundario de un transformador de corriente (TC) nunca debe dejarse abierto cuando circula corriente por el primario, ya que al hacerlo se pueden crear altas tensiones peligrosas. He aquí por qué:
1. Alta tensión inducida:
- Un transformador de corriente funciona según el principio de inducción electromagnética. La corriente en el devanado primario induce una corriente en el devanado secundario. Si el secundario se deja abierto, no circula corriente por él, lo que impide que el campo magnético se oponga a la corriente primaria.
- Como resultado, el flujo magnético en el núcleo aumenta drásticamente, lo que induce una tensión muy alta en el devanado secundario. Esta alta tensión puede dañar el aislamiento del TC o crear un grave peligro para la seguridad de las personas que se encuentren cerca.
2. Saturación y daños en el núcleo:
- Sin carga (secundario abierto), el núcleo del TC puede saturarse debido al elevado flujo magnético. Una exposición prolongada a esta condición puede dañar permanentemente el núcleo del TC al alterar sus propiedades magnéticas, reduciendo su precisión y rendimiento con el paso del tiempo.
3. Peligros para la seguridad:
- La alta tensión producida a través del secundario abierto puede ser letal y dañar los equipos conectados. En algunos casos, la tensión puede incluso provocar un arco eléctrico, lo que supone un riesgo importante de incendio o descarga eléctrica.
4. Inexactitud en las mediciones:
- Si el secundario del TC está abierto, no puede realizar su función principal, que es medir la corriente con precisión. Con el circuito secundario abierto, no hay forma fiable de medir la corriente en el circuito primario, lo que puede dar lugar a lecturas incorrectas y fallos de relé en los sistemas de protección.